Por - Alyssa Cole
Cuando nadie está mirando Es una novela asombrosa y difícil de leer. También es difícil de describir y, a pesar de que se anuncia como un thriller, es solo un thriller en parte y, por lo general, no está cerca del final. Es una combinación de diferentes géneros para crear un mensaje increíble sobre equidad y mejora social.
Sydney Green, una mujer de unos 30 años, está luchando en un sentido real por conservar la casa de su madre en Gifford Place, un barrio que está pasando por una “renovación” en Brooklyn. Las empresas, las suites de apartamentos y los millennials de Bougie que aplastan el alma se están mudando y expulsando la cultura y las personas que fabricaron el vecindario. Obligado a vender, pero no listo para mudarse, Sydney organiza un recorrido por el barrio que envuelve sus raíces africanas y un pasado que está a punto de desaparecer.
Theo, un hombre blanco con un pasado misterioso, inicia una amistad improbable con Sydney y se convierte en su asistente en la visita. Mientras los dos comienzan a investigar y planificar, sus vecinos comienzan a desaparecer. Ambos están en peligro.
La narrativa se divide entre Sydney y Theo. Ambos son personajes dinámicos. El resentimiento de Sydney por la traición de lo que le está ocurriendo a su vecindario se refleja en las páginas. Su disgusto oculta su agonía y el temor de perder todo lo que ha conocido. Por otra parte, el personaje de Theo es algo oscuro. Oculta sus sentimientos, por lo tanto numerosas cosas diferentes, y es un toque de misterio. Él juega el papel del individuo blanco que necesita ayudar a la razón y, sin embargo, es descuidado con respecto a lo que realmente está sucediendo.
La historia hizo que me mantuviera alerta, ya que nunca estaba realmente seguro de hacia dónde iban las cosas, sin embargo, hacia dónde VA de una manera excepcionalmente directa y clara. Hay un grado de presión oculta y misterio a lo largo de esa construcción paso a paso a medida que avanza la narración.
Necesito decir que este libro se descarrila en el último 25% más o menos. Estaba pensando si lo que realmente estaba sucediendo era todo un sueño loco, pero todo era genuino. Me desanimó un poco lo lejos que llegó Cole, pero luego me di cuenta de que tenía que ir de esta manera para transmitir su idea.
Esta es una lectura oportuna, provocativa y atractiva. Es un cambio de página con un mensaje que, idealmente, mantendrá al lector reflexionando sobre el racismo, la historia, la mejora y la equidad social.